El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que es por la corrupción y por estar en contra de la gratuidad de la salud que algunos de los nueve estados, todos de oposición, no se han adherido al IMSS-Bienestar. Sin embargo, anunció que, en la recta final de su gobierno, se dedicará a consolidar el sistema de salud para dar atención médica y medicamentos gratuitos a los mexicanos.
“¿Qué argumentan estos nueve estados, unos, y no hay que desconocer sus razones?, porque sostienen que ellos tienen la capacidad para garantizar el servicio de salud y que no quieren la federalización, que quieren mantener ellos la responsabilidad y la facultad para garantizar el servicio de salud. Lo segundo es que, aunque parezca increíble, no les gusta la gratuidad, no están de acuerdo y así hay mucha gente con ese pensamiento conservador, porque sostienen que eso es populismo, paternalismo”, explicó como primeras dos razones.
Una tercera, afirmó, es la corrupción, la cual –dijo– encontró en todo el sistema de salud, por lo que se permitían los negocios con los medicamentos.
“Lo tercero es por la corrupción. Acabamos de estar en el Estado de México y hasta las farmacias de los hospitales estaban privatizadas”, comentó.
Tras el fracaso del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador puso en marcha el Acuerdo Nacional de Federalización de los Servicios de Salud.
Hasta ahora solo los estados gobernados por Morena y aliados se han adherido al IMSS-Bienestar: Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chiapas, Colima, Ciudad de México, Guerrero, Hidalgo, Estado de México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas.
El objetivo de este sistema de salud es atender a 53.2 millones de personas de las 66.4 millones que no tienen seguridad social.
En la recta final de su gobierno, el presidente López Obrador está realizando una gira de evaluación por las 23 entidades en las que opera el IMSSS-Bienestar y para el 21 de marzo tiene prevista una reunión con los mandatarios estatales en Oaxaca para abordar el tema de salud.
“Queremos que se garantice el derecho a la salud. ¿Qué significa?, que tengan atención médica, que existan los médicos generales, los especialistas, los centros de salud, los hospitales con buenos equipos, que se hagan estudios, que se lleven a cabo operaciones quirúrgicas, que se entreguen todos los medicamentos y todo el servicio de manera gratuita. Ese es el desafío y lo queremos tener el sistema funcionando al 100 antes de que yo deje la presidencia de la República. En eso estamos, se ha avanzado bastante también”, comentó.
El presidente recordó que, durante el periodo neoliberal, los gobiernos en turno actuaron con corrupción y desviaron recursos del sistema de salud.
“Lo que se hizo en el periodo neoliberal fue descentralizar los servicios de salud pública, dejaron a la Secretaría de Salud como un cascarón, nada más con funciones normativas y financieras porque se dedicaban a transferir los fondos a los estados, sin embargo, sólo manejaban como 10 hospitales la Secretaría de Salud federal y todo lo manejaban los estados. ¿Qué sucedía? Bueno, se enviaban los fondos, se transferían los recursos a los estados y se desviaban o se hacían negocios con la compra de medicamentos, de ahí fue donde surgieron estos intermediarios, con mucha influencia, que le vendían a los gobiernos todos los medicamentos”, indicó.
Rumbo a la Presidencia de la República, la candidata de la oposición, Xóchitl Gálvez, ha propuesto que, de ganar, regresará el Seguro Popular, el cual fue eliminado durante el gobierno de López Obrador.